Editorial 647

Las dos caras de la misma moneda

Esta última semana, con motivo del Día Mundial de la Abeja, en dos medios de noticias generales reporteaban a dos apicultores sobre la situación de la apicultura como actividad. Uno de ellos señalaba la importancia de la apicultura como actividad productora de alimentos sanos y saludables y el mantenimiento de la biodiversidad, además de lo apasionante de la actividad. En cambio, el otro apicultor, comentaba los problemas que enfrentamos por la falta de lugares para poner colmenas, ya sea por el crecimiento de las urbanizaciones como por el efecto de los plaguicidas, a lo que le sumaba la adulteración de la miel a nivel internacional, terminando por el desfasaje que hay entre el dólar de exportación y el del mercado.

Dos caras de la misma moneda. Ninguno de los dos apicultores falta a la verdad, la diferencia es la cara de la moneda que elegimos para evaluar cómo está nuestra actividad. Lo cierto es que la apicultura pese a los problemas sigue su rumbo, crece de a poco, con algunas políticas que llegan a la base y otras que solo son una promesa, con una ausencia de lineamiento a nivel nacional y con algunas provincias que avanzan más que el resto por mayor claridad de la gestión.  Los problemas que enfrentamos son grandes, el cambio climático nos pega de frente, si bien hay una conciencia generalizada de buscar ambientes más sanos, el aumento del uso de agrotóxicos es cada vez mayor, porque se aprueban nuevos transgénicos que consumen más químicos que nos dejan una rara postal otoñal naranja glifosato. Para terminar el combo, la adulteración a nivel global le pone el precio a la miel y sino USA con su dumping dirigido, nos ata los precios que necesitamos para seguir manteniéndonos como sector.

La probabilidad de que la moneda caiga más de una cara que de la otra depende del peso equilibrado que tenga la moneda y del azar.  Como nuestro compromiso como dirigentes es mejorar nuestro sector, aunque la moneda este desequilibrada elegimos siempre la cara positiva, sabiendo que la cara negativa de la realidad del sector siempre estará y crecerá por si sola y no podemos dejar que el azar defina nuestro futuro.

Por eso en SADA trabajamos todos los días, renovando esperanzas y sumando nuevos colaboradores, intentando que cada día la cara que nos toca sea positiva. 

Mesa Directiva – SADA 

Mayo 2022